El atleta parolímpico transitó la ruta de Puerto Tarifa, en España, a Punta Cires en Marruecos, en cuatro horas y 29 minutos; y supo sobreponerse a un dolor en el brazo, que se le presentó al lograr su hazaña, de convertirse en el primer latinoamericano en cruzar el estrecho.
Barría, un joven de 25 años y oriundo de la provincia de Colón, en su nativa Panamá, agradeció a Dios por haber superado la prueba, y exhortó a todo aquél que tenga un sueño, a esforzarse por conseguirlo.